Cristina Camprubí

Cristina Camprubí, investigadora de genética molecular y consultora de profesionales en genética humana.

¿Cuál es tu formación académica?
Licenciada en Biología i Doctora en Biología Celular per la Universidad Autónoma de Barcelona.
¿En qué consiste tu trabajo?
En el estudio de la genética y epigenética, tanto desde el ámbito de la investigación como en el ámbito clínico, en el diagnóstico de enfermedades genéticas y epigenéticas. Es decir, en el desarrollo, conocimiento y la aplicación de las técnicas del laboratorio que permiten su diagnóstico y en la interpretación de los resultados que se derivan y, en función de éstos, en la elaboración de los informes por los médicos solicitantes y pacientes, así como en ofrecerles un consejo genético cuidadoso.
Por qué escogiste éste trabajo?
Diría que por vocación. Desde jovencita ya quería dedicarme a la genética humana, a su estudio y al diagnóstico de enfermedades genéticas.
¿Cuáles son los motivos por los que se hacen estudios en los embriones?
Por ejemplo en aquellos casos en que una pareja con deseo reproductivo han sufrido abortos de repetición y está indicado un estudio cromosómico de los embriones, pero sobre todo en casos en que uno de los miembros de la pareja (o los dos más raramente) son portadores o afectos de una enfermedad genética o son portadores de una anomalía cromosómica y evitar así que esta pueda ser heredada por la descendencia causándole el desarrollo de una enfermedad grave.
En caso de que queramos estudiar los embriones de una pareja en la que uno o los dos miembros es/son portador/s afecto/s de una enfermedad causada por una mutación en el ADN, no se pueden realizar estos estudios en embriones sin haber identificado previamente la anomalía genética concreta en el/los progenitor/es que es/son portador/es o afecto/s. Es decir, son estudios dirigidos, buscamos una mutación o cambio concreto del código genético.
¿Qué técnicas se utilizan para hacer estos estudios?
Se aísla una célula del embrión (o unas pocas en embriones más desarrollados), se hace una extracción del ADN y este se amplifica en el laboratorio para tener suficiente para proceder a su análisis o estudio.
En el caso de tener que estudiar ganancias o pérdidas de cromosomas enteros o de pequeñas fracciones de los mismos, se amplifica todo el ADN de la célula (se hace lo que se llama Whole Genome Amplification; WGA) y seguidamente se aplica una técnica llamada aCGH (array Comparative Genomic Hybridization). En este caso lo que se hace es marcar de color rojo todos los cromosomas de una muestra de ADN control (normal) y en verde se marcan todos los cromosomas de la muestra problema y seguidamente se mezclan y la mezcla se hace hibridar sobre un chip que contiene todo el genoma y permite identificar en ella todos los cromosomas y sus regiones a una elevada resolución (imagina los píxeles de una fotografía y que cada uno de estos píxeles fuera una región pequeña de tu genoma). En el chip observaremos puntos (píxeles) de color amarillo si hay la misma cantidad de ADN control que problema y observaremos rojo si hay más de la muestra control (pérdida de material genético en la muestra problema) y observaremos verde si hay más de la muestra problema (ganancia de material genético en la muestra problema). Así se pueden identificar estas ganancias o pérdidas de cromosomas enteros o bien ganancias o pérdidas parciales de cromosomas.
En el caso de tener que estudiar una mutación o cambio concreto en el ADN, una vez aislado todo el ADN de una célula del embrión (o unas pocas en embriones más desarrollados) se amplifica sólo la región de interés que queremos estudiar y seguidamente se estudia la secuencia de nucleótidos (las bases -letras- del ADN o el código genético) mediante técnicas de secuenciación que se basan en incorporar un color a cada base (letra) del DNA (C/G/T/A) y al leer el color poder transcribirlo a la base o letra que le corresponde. Ejemplo: C = azul; G = negro; T = rojo; A = verde; si en el aparato que nos permite realizar estos estudios o análisis vemos negro-rojo-azul-azul-negro-verde-rojo-rojo-verde sabemos que la secuencia de nucleótidos del ADN de aquella fracción que estamos estudiando es GTCCGATTA y podemos compararla con la secuencia normal e identificar cambios.
¿Cuáles son las enfermedades genéticas hereditarias más frecuentes? ¿Y las menos frecuentes?
Dejando de lado por ejemplo el Síndrome de Down que es causada por una anomalía cromosómica, concretamente por la presencia de tres cromosomas 21 (lo que se conoce como trisomía 21), si nos centramos en enfermedades genéticas causadas por anomalías o mutaciones en genes, la gran mayoría entran en el criterio de enfermedad rara siguiendo las directrices europeas (estas directrices son diferentes según los países).
Las enfermedades genéticas son pues mayoritariamente consideradas enfermedades raras, es decir que aparecen en la población con una baja frecuencia. En Europa se considera enfermedad rara aquella que afecta a menos de 5 personas de cada 10.000 o lo que es lo mismo a 1 de cada 2.000 personas. Sin embargo se conocen actualmente unas 7.000 enfermedades raras que en total se considera que afectan a un 7% de la población mundial.
Aclarado esto, una de las enfermedades genéticas más frecuentes es la Fibrosis Quística, la que en España se presenta en 1 de cada 3.500 nacimientos. Otras también relativamente frecuentes son la Hemofilia A que afecta a 1 de cada 5.000 varones, la Neurofibromatosis tipo I que afecta a 1 de cada 3.000 personas, la alfa-talasemia que tiene una frecuencia también bastante elevada en la población mundial, la hemocromatosis que afecta a una de cada 500-1.000 personas o la Distrofia Muscular de Duchenne que afecta a 1 de cada 3.300 a 5.000 varones.
En cuanto a la pregunta de cuáles son las enfermedades genéticas menos frecuentes, es una pregunta muy difícil de responder. No es fácil decir cuáles son las enfermedades genéticas menos frecuentes ya que hablamos de enfermedades que afectan a un número de personas muy limitado y que por lo tanto son muy desconocidas y es muy difícil encontrar algún caso y que éstos sean conocidos por todos los profesionales que trabajamos en genética. Hay enfermedades genéticas que se han descrito en unos pocos casos en todo el mundo y para las que aún no se ha definido nombre que las identifique. Dejando estos casos extremos, y por poner un ejemplo de enfermedad genética muy poco frecuente se podría mencionar el Síndrome de progeria de Hutchinson-Gilford que afecta a 1 de cada 4.000.000 de nacimientos, pero insistiendo en que desconozco el listado de enfermedades genéticas "menos frecuentes" literalmente.
Estas enfermedades ¿son dominantes o recesivas? ¿Se sabe en qué cromosoma se encuentran?
Hay de todo, tanto dominantes (por ejemplo la Neurofibromatosis tipo I) como recesivas (por ejemplo la Fibrosis Quística), como con herencia ligada al cromosoma X (por ejemplo la Distrofia Muscular de Duchenne).
En cuanto a la pregunta de si se conoce el cromosoma en el que se encuentran, sí, así es. Al conocerse el gen que causa la enfermedad se conoce el cromosoma en el que se encuentra, ya que hoy en día todos los genes conocidos están mapeados o posicionados en el cromosoma correspondiente.
Seleccionando los embriones, ¿es siempre posible escoger los que no tienen la enfermedad, o existe algún caso que no permita obviarla?
Como hemos comentado previamente, en el caso del diagnóstico genético preimplantacional (en embriones), indicado en casos de parejas en los que uno o los dos son portadores o afectos de una enfermedad genética, implica siempre el conocimiento previo de lo que buscamos, así pues con el diagnóstico genético preimplantacional sí es posible identificar aquellos embriones afectos.
¿Los estudios de la genética molecular se decantan más hacia la curación de las enfermedades o hacia la prevención de que se hereden?
Primeramente, los estudios de genética molecular son necesarios a nivel de investigación para identificar genes causantes de enfermedades y una vez se conoce el gen o genes causantes, se podrá primero diagnosticar enfermedades genéticas y prevenir que éstas se hereden analizando la descendencia o bien a nivel de diagnóstico prenatal o bien preimplantacional. Esto es una elección muy personal de las parejas, ya que el diagnóstico genético preimplantacional implica obtener los embriones in vitro, mediante la reproducción asistida.
La curación de las enfermedades genéticas es muy complicada, ya que corregir la anomalía que la causa es muy difícil. A pesar de los esfuerzos que se hicieron años atrás en el desarrollo de la terapia génica, que consistía en intentar sustituir un gen anómalo por uno normal sin mutaciones, no se lograron resultados exitosos.
Según la gravedad o complejidad clínica de cada enfermedad en particular, sí que  conociendo el gen afectado, y por tanto conociendo la proteína que está funcionando incorrectamente o que falta, se pueden desarrollar con mayor eficiencia tratamientos que ayuden a mejorar la calidad de vida y esperanza de vida de los pacientes afectos.
¿Está regulado legalmente lo que se puede y no se puede hacer en tu trabajo? ¿El marco legal es el mismo en todos los sitios?
Mi trabajo, aunque indirectamente está relacionado con el diagnóstico genético preimplantacional, no es éste directamente. Trabajo en investigación en genética y epigenética y en diagnóstico genético y epigenético de enfermedades, pero a nivel pre y postnatal. Pero en cualquier caso, sí existen leyes que a este nivel protegen a los pacientes y a sus familiares con respecto principalmente a la protección de datos médicos y en el caso de estudios prenatales existen las leyes que lo regulan. El marco legal a este nivel es bastante común.
En cuanto al diagnóstico genético preimplantacional, también existe una ley que marca y regula unas directrices, aunque se ha ido desarrollando y ampliando en función de las necesidades y es una ley que ha ido cambiando y adaptándose a éstas y seguramente seguirá desarrollándose en el tiempo.
Comentar que existe un órgano permanente y con carácter consultivo denominado Comisión Nacional de Reproducción Humana Asistida (CNRHA) y que una de sus funciones es estudiar, actualizar y proponer listas de enfermedades genéticas y hereditarias que pueden ser objeto de diagnóstico genético preimplantacional, reúnan dudas o incertidumbres sobre su inclusión en los supuestos recogidos en la Ley 14/2006.
¿Existe algún tipo de problema ético en tu trabajo?
En el caso del diagnóstico genético pre y postnatal, no considero que existan problemas éticos ya que la buena ética profesional implica principalmente la confidencialidad en el tratamiento de los datos de los pacientes y sus familias.
En el caso del diagnóstico genético preimplantacional aunque no trabaje directamente, sí que conozco que hay ciertas situaciones o temas que deben tratarse con cuidado y que pueden considerarse un problema ético, como por ejemplo, en el caso de enfermedades genéticas de aparición tardía (por ejemplo la enfermedad de Huntington), en el que los progenitores no quieren conocer si sufrirán o no la enfermedad, pero debido a sus antecedentes en la familia tienen un riesgo de ser afectos y acabar desarrollándola y por tanto de transmitirla a la descendencia. En casos como este el diagnóstico preimplantacional implica dos posibilidades: que el personal médico y del laboratorio conozca y tenga que esconder el estado genético del progenitor con riesgo de ser afecto (pocos profesionales optan por esta situación), o bien se pueden hacer unos estudios indirectos que permiten seleccionar embriones sanos con total certeza evitando saber el estado del progenitor.
Otros problemas éticos del diagnóstico preimplantacional pueden derivar de casos que impliquen selección de sexo de los embriones, de descartar embriones que puedan ser portadores de una enfermedad pero que no serán afectos. Es un tema complejo y controvertido del que se podría hablar extensamente.
Con la tecnología que tenemos actualmente, ¿sería posible escoger las características para los embriones que quisieran los padres?
No podría responder a esta pregunta sin concretar a que hace referencia "las características". Si hace referencia a que los padres puedan escoger por ejemplo rasgos físicos de su descendencia, aunque la tecnología lo permitiera, que no es así para según qué rasgos físicos y mucho menos psicológicos o intelectuales, la Ley de Reproducción Humana Asistida no lo permite y estas técnicas deben usarse o aplicarse únicamente en casos indicados médicamente.
¿Puedes explicar alguna anécdota interesante que te haya pasado en el trabajo?
Algunas se han dado en ciertas solicitudes de estudios de paternidad por ejemplo, o en una ocasión en la que ante un caso de un hijo afecto de una enfermedad genética con herencia autosómica recesiva, y que por tanto los padres deben ser los dos portadores, descubrir que el padre no lo es y por tanto sospechar que no es el padre biológico.
Y, sobre todo, situaciones muy especiales que se dan en algunas ocasiones en que nos llega el agradecimiento de padres con hijos afectos de una enfermedad genética cuando finalmente se ha encontrado la causa, después de mucho estrés buscando respuestas o un diagnóstico. Aunque pueda parecer algo negativo el tener que decir a unos padres que su hijo tiene una mutación causante de una enfermedad, no lo es tanto si se tiene en cuenta que hablamos de enfermedades denominadas raras y que a menudo son muy difíciles de diagnosticar clínicamente por especialistas que conozcan la enfermedad en concreto y soliciten un estudio genético muy dirigido y probablemente acertado. En muchas ocasiones los padres sufren mucho buscando respuestas y para ellos es liberador conocerlas finalmente y poder enfrentarse a una enfermedad en concreto, buscar apoyo en asociaciones de familias y en trabajadores sociales, poder entonces tener el tratamiento más adecuado, etc. ..
En todos los sentidos es un trabajo muy gratificante, tanto desde el punto de vista de la investigación como desde el punto de vista más aplicado (diagnóstico), y lleno de anécdotas muy interesantes!.

0 comentarios:

Publicar un comentario